Cómo poner en práctica el consumo colaborativo
Estas nuevas fórmulas se están imponiendo en un momento en el que los usuarios están preocupados por el ahorro y por reducir gastos. La crisis ha obligado a muchos ciudadanos a buscar nuevas alternativas no sólo para ahorrar, sino también para ganar algo de dinero. Un claro ejemplo de ello es el consumo colaborativo, un sistema eficiente de consumo en el que todos salen ganando.
Gracias a Internet, esta nueva manera de consumir ha calado hondo en usuarios y ciudadanos que buscan un nuevo estilo de vida más sostenible, que da importancia al ahorro, y en el que pueden ponerse en contacto con gente que quiere vender, compartir, prestar o simplemente intercambiar cosas o servicios.
El consumo colaborativo se puede clasificar en tres sistemas:
- Sistemas basados en producto. Aquellos en los que utilizamos un producto sin ser dueños. Un claro ejemplo de ello es el carsharing (alquiler de coche) y carpooling (compartir coche).
- Sistemas basados en mercados de redistribución. Se refiere al intercambio o donación de productos, con el fin de darle una segunda vida. Algunas páginas como Ebay.es o segundamano.es ofrecen al consumidor todo tipo de productos para ser reutilizados.
- Sistemas basados en estilos de vida colaborativos. Van destinados a compartir experiencias, como por ejemplo alojamiento gratuito (couchsurfing), intercambio de la casa en vacaciones, entre otros…
Cómo podemos practicar el consumo colaborativo
-Compartir bicicleta. ¿Utilizas un sistema de arrendamiento de bicicletas en tu ciudad? Algunos ayuntamientos de grandes ciudades tienen a disposición de los ciudadanos el alquiler de bicicletas. La gran ventaja es que puedes disponer de ella en el lugar que desees y dejarla en tu lugar de destino y viceversa. No contamina y es una alternativa sana y económica. ¿Te animas?
-Alquilar la parcela de garaje. Es una manera de conseguir un ingreso extra. Existen dos posibilidades: alquilar la plaza a tiempo completo o parcial. Si optas por la primera opción, deberás dejar aparcado tu vehículo en la calle, a no ser que dispongas de una segunda plaza de garaje. Dependiendo de la ciudad, los precios de alquiler oscilan entre los 60 y 130 euros al mes. Si eliges la segunda alternativa, podrás alquilar la parcela durante el tiempo que permanezca tu coche fuera.
– Compartir coche. Conocido también como carsharing o carpooling. ¿Por qué no compartir un coche con un compañero de trabajo? o ¿por qué no viajar en coche con otras personas, compartiendo gastos, en lugar de recorrer cientos de kilómetros solo? Es eficiente para el medio ambiente ya que reduce la contaminación, es cómodo y, sobre todo, es económico. Ahorrarás en combustible y tu bolsillo te lo agradecerá.
Existen diferentes compañías en el mercado que se encargan de poner en contacto a conductores y pasajeros que desean hacer el mismo trayecto. Blablacar.es, Carpooling.es, Compartir.org, BusVao.com y Viajamos juntos.com son algunas de ellas.
-Intercambio o donación de ropa. Debido a que los pequeños de la casa crecen a un ritmo muy rápido, destaca el número de webs de intercambio y alquiler de ropa, juguetes, etc. Entre ellos:
- En Reciclando.eu se pueden intercambiar artículos de bebés, niños y embarazadas en la que el intercambio no es de persona a persona, sino a través de una bolsa común con un sistema de puntos.
- Grownies.com es una web de intercambio de ropa de 0 a 8 años que opera en toda España.
- 5 lobitos. Creada para poner en contacto a quienes ofrecen o buscan artículos infantiles de segunda mano cerca de casa. Se ponen a disposición todo tipo de productos, desde cunas, carritos, tronas, ropa juguetes, bañeras…
-Intercambio de casas o apartamentos. ¿Quieres viajar, pero cuentas con poco presupuesto? El intercambio de vivienda es una tendencia cada vez más extendida, que consiste en cambiar la casa con otras personas que residen en el destino donde quieres viajar. Bastará con un acuerdo previo entre las dos partes interesadas, de forma gratuita y durante el tiempo pactado. Es la manera más barata de viajar y, además, te permitirá ahorrar. Evitarás los gastos de alojamiento de un hotel u apartamento y sólo tendrás que asumir los gastos de desplazamiento.
El procedimiento habitual suele ser inscribirse en un club de intercambio de vivienda, previo pago de cierta cantidad de dinero (entre 50 y 100 euros aproximadamente). Los interesados se pondrán en contacto con el dueño de la casa que le interese para llegar a un acuerdo, acordar el tiempo y aclarar las normas que imperarán en cada casa. Algunas webs que puedes visitar:
- Intervac. Es un club que cuenta con más de 20 años de experiencia. Hay que pagar 120 euros para suscribirse durante un año.
- Intercambiodecasas.com permite el intercambio de casas, apartamentos y pisos para disfrutar de las vacaciones. Lo único que tendrás que pagar será la suscripción al servicio, que asciende a 49 euros por año.
- Homeforhome.com facilita el intercambio de casas para ir de vacaciones y que te salgan económicas.
-Compartir wifi. Una opción en alza entre vecinos para gestionar la economía doméstica y ahorrar. Para poder compartir el wifi entre vecinos de una misma comunidad es necesario que uno de ellos tenga el ADSL. La señal se transmite al resto de los propietarios de las viviendas que la comparten. Esta alternativa supone un ahorro de aproximadamente 20 euros mensuales, además de ayudar a ahorrar en el consumo de energía.
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