Micropigmentación: técnica y zonas a pigmentar
La micropigmentación (también llamado maquillaje permanente) es la implantación de pigmentos específicos en la dermis de manera inocua y casi indolora a través de una aguja. El objetivo principal es corregir, modificar y embellecer de forma fácil y semipermanente rasgos faciales (cejas, labios, párpados…) o corporales (cuero cabelludo, areolas mamarias…). También permite disimular quemaduras, manchas y cicatrices.
La clave de su éxito consiste en que nadie aprecie la micropigmentación a simple vista. Cuanto más natural sea la elección, mejor quedará.
Acudir al especialista
Durante la primera consulta el especialista evaluará tu historial clínico, te asesorará de todas las ventajas del procedimiento, realizará una prueba para conocer si tienes algún tipo de alergia al pigmento y seleccionará los colores apropiados a tu tipo de piel y, a su vez, te indicará los cuidados necesarios posteriores al procedimiento.
Además, el paciente deberá firmar un documento de consentimiento en el que se especifican las contraindicaciones que puede conllevar este tratamiento, las indicaciones previas (como los alimentos y bebidas a evitar horas antes de la micropigmentación, no tomar el sol ni realizarse limpiezas de cutis, por ejemplo).
¿Dónde y cuándo utilizar esta técnica?
La micropigmentación se puede utilizar en diferentes partes del cuerpo para fines estéticos. Entre los usos más habituales se encuentran:
- Labios. Para aumentar, disminuir, corregir imperfecciones o darles volumen.
- Pieles con quemaduras o cicatrices. Para camuflar las marcas.
- Cejas. Poblarlas, dibujarlas, corregir asimetrías o imperfecciones.
- Ojos y párpados. Para conseguir una mirada expresiva. El objetivo es aumentar el volumen de las pestañas y elevar el ojo. Simula la raya de maquillaje o eye liner.
- Areolas. Tras someterse a mastectomías se procede a darle a la areola una apariencia más natural y realista después de una operación de mama de esa envergadura. También se utiliza para disimular cicatrices de aumento o disminución de pecho.
- Alopecias. Es eficaz cuando se trata de tapar zonas del cuero cabelludo donde existe alopecia incipiente. Produce un efecto óptico de más densidad de pelo.
Duración
Es un tratamiento temporal, ya que los pigmentos se van absorbiendo con el paso del tiempo, por lo que será necesario que se realicen sesiones de retoque en un futuro. La permanencia oscila entre dos y cuatro años, dependiendo del tipo de piel, de la edad, de los cosméticos utilizados y el tono elegido para el tratamiento. Después de una semana, el pigmento se aclara por la regeneración de la piel, proporcionando una apariencia natural, que es precisamente el efecto que se quiere conseguir.
Contraindicaciones y cuidados pos-tratamiento
El tratamiento está contraindicado sobre verrugas, pecas o lunares, entre otros. Tampoco debe realizarse durante el embarazo o en personas con diabetes, hepatitis, que estén recibiendo quimioterapia o tratamientos anticoagulantes.
Además de limpiar la zona tratada con suero fisiológico en una semana, durante los quince días siguientes a la micropigmentación no conviene bañarse en la playa, piscina o acudir a una sauna. Tampoco podrá rizarse las pestañas, ni aplicar tinta en pestañas o cejas.
En el primer mes tras el tratamiento es aconsejable no usar cosméticos o lociones con ácidos, no exponerse a la luz solar, ya que puede dañar la piel de la zona tratada. Y, por supuesto, seguir los cuidados que haya marcado el médico especialista.
Precios
El coste de esta técnica depende del establecimiento y/o clínica donde se lleve a cabo y también la zona a tratar. Así, en labios, ojos, cejas el precio oscila entre los 200 y 500 euros. En cambio, debido a su complejidad, las tarifas de reconstrucción de la areola mamaria oscilan entre los 500 y 800 euros.
A tener en cuenta
Este tratamiento debe realizarse por especialistas, en un centro homologado, porque se trata de una técnica que conlleva ciertos riesgos y contraindicaciones.
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