Los españoles pagamos 860€ más al año en la cesta de la compra a causa de la inflación
Que los precios se han disparado es de dominio público. No hay bolsillo que no lo haya notado tanto en materia de energía, de combustible o, y sobre todo, a la hora de hacer la compra. Los alimentos y otros elementos básicos están por las nubes, y llegar a fin de mes es para muchos una heroicidad. Y ahora, gracias a un informe elaborado por la OCU, podemos cuantificar ese incremento de precios que castiga nuestra economía doméstica. Los españoles pagamos 860 euros más al año en la cesta de la compra a causa de la inflación.
El IPC sigue por encima del 15% y el precio de los alimentos no deja de subir, habiendo alcanzado el índice más alto desde 1994. Son muchas las familias que han tenido que renunciar a comprar algunos productos o se han visto obligados a elegir entre unos y otros, y alternarlos en las adquisiciones semanales.
Mayores incrementos
Las mayores subidas interanuales afectan al azúcar (52,1%), la mantequilla (38,2%), la leche entera (33,4%), el aceite de girasol (32,1%), el aceite de oliva (30,5%), los productos de panadería (28,2%), las harinas (28,1%), los huevos (27,2%), a los yogures (26,7%), al queso (20,5%) o al arroz (19,6%). Todos ellos productos de primera necesidad, y que se han visto afectados por las acciones del gobierno, que les ha reducido el IVA o los ha incluido en la cesta de precios rebajados de las grandes superficies. Pero estas iniciativas no han sido suficientes para contrarrestar el incremento y aliviar la carga del consumidor.
Por este motivo, la OCU insta al Gobierno a bajar temporalmente el IVA al 0% a los alimentos de primera necesidad con un perfil nutricional más saludable (tal y como ya se hace en Irlanda y Reino Unido): frutas, verduras, legumbres, arroz, pasta, carne y pescado frescos o congelados, leche, huevos, pan integral, frutos secos y aceite de oliva virgen. Así como bajarlo al 4% a otros alimentos básicos con un perfil nutricional al menos aceptable: lácteos sin azúcares añadidos, cereales de desayuno integrales sin azúcares ni grasas añadidas y aceites de semillas, entre otros.
