Si bien, en ocasiones anteriores, ya publicamos consejos y recomendaciones para comprar en Black Friday y proteger nuestros derechos como consumidores en este día tan frenético, conviene recordar ciertas orientaciones que pueden ser fundamentales para cualquier consumidor digital. Hablamos de los gastos de envío y plazos de entrega.
Como todos los años (recientes) por estas fechas, se avecinan días intensos para los avispados cazadores de chollos. Llega, el Black Friday. Pese a que, paradójicamente, es un nombre que originalmente hizo referencia a una de las mayores crisis financieras de la historia (si os interesa más el tema, me refiero a lo que los analistas bursátiles llamaron el viernes negro de 1869), el Black Friday (y su análogo online, el cibermonday) es uno de los días del año con las rebajas más altas en productos de consumo.
Así, son múltiples las tiendas online y comercios que reducen considerablemente los precios de gran parte de su catálogo, siendo un día en el que la afluencia de compras por internet aumenta de forma exponencial. Este año, indica el Observatorio Cetelem, los españoles nos gastaremos una media de 208 euros en estas fechas. La mitad de los consumidores optará por las compras online, según el mismo estudio.
Como novedad en esta ocasión, en Amazon, los trabajadores han convocado huelga durante el Black Friday. Con esto, unido a la multitud de pedidos que se realizan en el día, cabe la posibilidad de que tardemos más de lo que esperamos en recibir nuestras compras, pudiéndose incluso incrementar los gastos de envío de nuestras compras. Por lo tanto:
- ¿Cómo podemos comprobar realmente cuándo llegará nuestro pedido?
- ¿Qué ocurre con los gastos de envío?
Gastos de envío en el Black Friday
Antes de pagar (es decir, de que terminemos el proceso de compra), es imprescindible fijarse en los gastos de envío que se indican y cuáles son las tarifas de envío exactas que se aplicarán. Lo habitual es que encontremos las tarifas y su importe justo antes de pulsar el botón que confirme nuestra compra y nos remita a la pasarela de pagos.
¡Cuidado! El importe no será siempre el mismo para todos los productos y envíos. Puede ser fijo o variable en función de si:
- El envío es desde un destino peninsular o no.
- La distancia.
- El peso o el número de bultos.
Es posible que, incluso, ni siquiera aparezca un desglose de gastos de envío. Lo cual significa que, o bien los portes son gratis, o bien el comercio titular de la página no nos está informando correctamente del precio de la oferta que nos brinda.
Como es más habitual el segundo caso que el primero (y más doloroso para el bolsillo), para despejar dudas siempre es recomendable que revisemos las condiciones generales de compra para:
- saber cuáles son las políticas de envío que tiene la página,
- comprobar si efectivamente se nos imputan una serie de gastos de envío.
- y, como siempre, guardar documentación de esas condiciones de compra.
¿Y cuándo llega el paquete que compro en Black Friday?
Por otro lado, también es importante prestar atención al plazo de entrega que se nos indique, máxime en días como el Black Friday. Sobre todo, como señalamos en este post, con convocatoria de huelga en el mayor «market place» español, ya que el mismo plazo de entrega puede verse truncado. Los operadores de logística ya han advertido que los plazos más comprometidos de entrega serán los de 24 horas.
La legislación relativa a consumidores y usuarios indica que es obligatorio indicar un plazo de entrega con un máximo de 30 días, por lo que si no se especifica durante el proceso de compra, es muy probable que el mismo esté reflejado en las condiciones generales de compra, en el apartado de política de envíos (o similar). Pese a ello, hay páginas que ofrecen servicios “exprés” de entrega e incluso indican el día exacto en el que se recibirá el pedido.
De nuevo, aunque es obligatorio que se nos avise de tal situación, nos encontramos ante la posibilidad de que el plazo de entrega se vea afectado, razón por la cual es recomendable volver revisar las “nunca suficientemente queridas” condiciones generales de compra y ver qué se nos indica al respecto. ¿Hemos dicho ya que es bueno guardar copia? Pues eso.
¿Y qué ocurre si, pese a todo, no recibo mi pedido?
Ante esta situación tenemos dos opciones:
- Como primera opción, es recomendable contactar con atención al cliente de la página en donde hayamos comprado o, en su caso, con los titulares de dicha página.
- En caso de no llegar a una solución, podemos acudir a la Oficina Municipal de Información al Consumidor (OMIC) más cercana, a fin de que nos ayuden a mediar en nuestra desventura.
- Tampoco está de más hacerles un comentario en las redes sociales, citando la cuenta del vendedor para obtener una respuesta más temprana. Muchas páginas online también tramitan la atención al cliente en Twitter o en los comentarios de su página de Facebook.
¿Y si la página donde he comprado no es española?
- En caso de que no lleguemos a un acuerdo y se trate de una página europea, podemos acudir al apartado de resolución de litigios en línea que se nos ofrece en la Unión Europea o bien acudir al Centro Europeo del Consumidor.
- Si se trata de una página no europea, podemos acudir a la página web de econsumer a fin de que nos ayude a mediar con nuestra compra.
Así que ya sabemos: ¡Cojamos lo mejor del Black Friday pero con nuestro habitual cuidado con la parte legal, para que no tengamos recuerdos de su origen negro, negrísimo, para nuestras finanzas personales!
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