La “vuelta al cole”
Bolígrafos, reglas, cuadernos, libros de texto y, en definitiva, todos los elementos que nuestros hijos guardan en la mochila requieren, como cada año, un importante esfuerzo para nuestra economía doméstica. Así, se estima que el inicio del nuevo curso académico suponga un coste medio de 640 euros por niño. Cantidad significativa, sobre todo en la delicada situación económica que atraviesa la mayoría de hogares españoles.
Consejos de ahorro
Una buena recomendación antes de salir a comprar es planificar el presupuesto y determinar en qué se va a emplear el dinero. De esta manera, podemos evitar gastar más de la cuenta y caer en la tentación de realizar compras innecesarias.
Otra medida de ahorro acertada es el reciclaje de ropa o material escolar, como el caso de los libros de texto de hermanos mayores o amigos. Si no se cuenta con personas conocidas a las que poder recurrir, se puede optar por los artículos de segunda mano. También, en algunos centros culturales, bibliotecas y librerías existe la posibilidad de adquirir libros usados en buen estado de conservación.
Pero si no queda otra salida que renovar el material escolar, el primer paso para reducir el gasto es comparar precios entre establecimientos para buscar las mejores ofertas. Según un estudio realizado por la empresa Tiendeo, -en el que se han comparado 91.500 productos recogidos en más de 800 catálogos de ofertas activas durante la tercera semana de agosto-, el gasto en la cesta de la compra de la “vuelta al cole” puede variar de 542 a 1.322 euros, libros de texto excluidos.
Un método cómodo y efectivo para comparar precios, o encontrar ofertas, es la búsqueda a través de Internet. Eso sí, no hay que olvidar en este tipo de compras aspectos como la seguridad de las webs que se visitan, la calidad de los productos que ofrecen, o el coste de los gastos de envío.
Desde la Asociación General de Consumidores (ASGECO) recomiendan adquirir los productos teniendo en cuenta tres criterios fundamentales: que sean resistentes y duraderos, que cumplan la función para la que han sido comprados y que se considere la relación calidad-precio.
Ayudas
La compra de libros es, sin duda, el mayor gasto del presupuesto total. Según la Confederación Española de Asociaciones de Padres y Madres de Alumnos (CEAPA), alrededor del 80 por ciento del presupuesto se destina sólo a esta partida. Por ello, reducir la inversión en este material no sólo es recomendable, sino necesario.
Afortunadamente, existen ayudas concedidas por diversas administraciones públicas destinadas a la compra de libros, transporte o comedores. Los expertos recomiendan a los consumidores informarse sobre cómo beneficiarse de ellas, ya que el ahorro anual puede ser relevante.
Dependiendo de los ingresos de la unidad familiar, algunas comunidades autónomas ofertan becas para la adquisición de libros, conceden subvenciones hasta una cuantía determinada o permiten desgravar un porcentaje de los gastos en la Declaración de la Renta (cheque-libro, por ejemplo).
Los buenos resultados académicos de los alumnos también tienen recompensa en lo que a ayudas se refiere. Existen becas por mérito concedidas por el Ministerio de Educación, cuya cantidad varía en función del nivel de estudios y los recursos familiares.
Algunos ayuntamientos, instituciones municipales, e incluso los propios colegios, plantean, además, iniciativas para la adquisición de material escolar. Así, existen programas de gratuidad de libros mediante el reparto de manuales usados, o modelos de préstamo y reutilización de libros de texto.
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