El auge en las ventas de las barbacoas ha propiciado que en el mercado se ofrezcan diferentes modelos donde elegir en función de lo que se esté buscando: seguridad, sencillez, calidad o versatilidad. Al decidirse por uno en concreto, hay que considerar factores como el espacio disponible, sus prestaciones, el tipo de combustible, los humos que pueda originar a los vecinos y por supuesto su precio.
Presupuestos para comprar una barbacoa
Si está pensando en estrenar una nueva barbacoa este verano no olvide algunos detalles que podrán orientarle a la hora de elegir la más apropiada, ya que en función de éstos el precio podrá oscilar entre 20 o 2.000 euros. En cualquier caso, si se decide por un modelo más caro de lo que había previsto y está seguro que eso es lo que realmente necesita lo mejor es preguntar por las diferentes opciones de financiación que suelen ofrecer los puntos de venta.
Aún así, siempre es conveniente comparar precios en diferentes establecimientos, sin olvidar de echar un vistazo a las ofertas online.
Tipos de barbacoas
En la actualidad existen barbacoas de carbón, en las que se puede usar también leña que da un delicioso sabor a las comidas; de gas, que facilitan la cocina y la limpieza, siendo las más prácticas; de obra, construidas habitualmente con ladrillo refractario y hechas a mano, la mejor opción si se quiere un diseño a medida; desechables, o montadas sobre un modelo portátil con una base de carbón; eléctricas, sencillas en el uso aunque quizás con la pérdida del sabor propia del carbón; y las prefabricadas, cada vez más habituales, y realizadas en materiales muy resistentes, más manejables para su transporte y limpieza.
Cómo mantenerla en buen estado
Independientemente del modelo que se escoja no hay que olvidar que un buen mantenimiento ayudará a conservarla mejor. Lo primero entonces es una buena limpieza que no deje olores, lavando en frío y con jabón la mayor parte de la barbacoa, mientras que la parrilla la mantenemos apartada para limpiarla después con papel de periódico humedecido en vinagre caliente o limón.
Para evitar las típicas manchas y los restos de carbón se puede cubrir la cubeta de la barbacoa con papel de aluminio, o colocar arena en el fondo. Ten en cuenta que lo importante, una vez que terminemos de usarla, y en caliente, será no olvidar retirar la parrilla mientras se echa bastante sal gruesa, frotando ésta con papel para eliminar la comida que se haya pegado, así como olores y sabores.
Medidas de seguridad
Si nos disponemos a encender una barbacoa lo primero que hay que ver es si en el lugar donde nos encontramos estaría permitido hacerlo, ya que en algunos espacios abiertos su uso está limitado por temas de seguridad a las áreas habilitadas para ello.
Si ésta se va hacer en una vivienda particular tan sólo habrá que tener en cuenta unas normas de seguridad y en el caso de las comunidades, consultar antes a la comunidad de vecinos evitando causar molestias o usar las zonas comunes.
Teniendo claro lo anterior, no debemos olvidar que siempre hay que tomar una serie de precauciones para hacer que nuestra barbacoa sea más segura:
- Colocarla lejos de materiales inflamables y en lugares alejados de vegetación abundante.
- Orientarlas al viento, con un emplazamiento despejado y de base sólida.
- Alejadas de los niños y siempre vigiladas.
- Dejar un cubo de agua, arena o extintor en una zona próxima.
- No encender o reavivar el fuego con alcohol o gasolina.
Otros artículos de interés:
