Premio Nobel de Economía 2024
Sus estudios sobre cómo la fortaleza de las instituciones influye en la prosperidad relativa de las naciones, les ha valido el Premio Nobel de Economía 2024 a los profesores Acemoglu, Johnson y Robinson. Unos planteamientos especialmente relevantes en la actualidad, cuando se advierten una evidente degradación de la calidad de las instituciones a nivel internacional.
La salud institucional fomenta riqueza
Los galardonados con el Premio Nobel de Economía 2024 han elaborado una serie de teorías de cómo las instituciones económicas y políticas ayudan al desarrollo y determinan tanto la prosperidad de las naciones como la desigualdad entre ellas. Y es que según las conclusiones de sus estudios, la salud institucional potencia el crecimiento económico y, por ende, genera riqueza global en las naciones.
Según aseguran los tres economistas en su trabajo, las instituciones determinan la relación entre quienes ostentan el poder (las élites gobernantes) y el resto de la sociedad. Cuanto mejores son, es decir, cuando la calidad de las instituciones es buena, mayor es la prosperidad y mayores son las posibilidades de desarrollo económico.
Instituciones inclusivas y extractivas
En el trabajo que les ha valido el Premio Nobel de Economía 2024, Acemoglu, Johnson y Robinson distinguen entre dos tipos de instituciones: inclusivas y extractivas.
Las instituciones inclusivas, que se fundamentan en el respeto al Estado de Derecho, suelen estar asociadas a sociedades democráticas. En estas instituciones, las élites permiten a la ciudadanía desenvolverse, de forma que alcance sus objetivos económicos y sociales. De este modo, este tipo de institución incentiva los comportamientos que facilitan el buen funcionamiento de la economía, la creación de riqueza y el desarrollo de la sociedad civil. Y una sociedad civil fuerte demanda mejores instituciones, con lo que se genera un círculo virtuoso de crecimiento económico, progreso social y mejora continua de las instituciones.
Las instituciones extractivas, en cambio, son aquellas donde se conculcan derechos básicos y no hay seguridad jurídica. Son frecuentes en autocracias, pero también pueden darse en democracias. En este caso, las élites persiguen extraer los recursos del resto de la sociedad para su propio beneficio. Este contexto limita el incentivo de la sociedad a generar riqueza, emprender e innovar y menoscaba el desarrollo social.
Por qué fracasan los países
Buena parte de los planteamientos que ha llevado a Acemoglu, Robinson y Johnson a ganar el Premio Nobel de Economía 2024 están recogidos en el libro publicado por los dos primeros y que se titula Porqué fracasan los países (Deusto). Una obra publicada en 2012, que se convirtió de inmediato en uno de los libros de economía con más impacto en el público en general e influencia entre los gobiernos.
Hay países pobres y países ricos. Pero, ¿por qué? Los motivos no siempre son evidentes, ni lógicos, ni responden a las mismas razones en cada caso. ¿Qué determina la riqueza o pobreza de un país? ¿Cómo se explica que, en condiciones similares, en algunos países haya hambrunas y en otros no? ¿Qué papel juega la política en estas cuestiones?
Por qué fracasan los países responde a estas y otras cuestiones con una nueva y convincente teoría: la prosperidad no se debe al clima, a la geografía o a la cultura, sino a las políticas dictaminadas por las instituciones de cada país. Debido a ello, los países no conseguirán que sus economías crezcan hasta que no dispongan de instituciones gubernamentales que desarrollen políticas acertadas.
Ganadores del Premio Nobel de Economía 2024
Daron Acemoglu (Estambul, 1967) es catedrático de Economía en el Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT). Ha publicado artículos en revistas de prestigio internacional y es uno de los diez economistas más citados en el mundo según IDEAS/RePEc.
James A. Robinson (Reino Unido, 1960) es politólogo, economista y catedrático en la Universidad de Chicago. Experto en Latinoamérica y África, en la actualidad desarrolla su investigación en Bolivia, la República Democrática del Congo, Sierra Leona, Haití y Colombia, donde durante muchos años ha impartido clases en época estival en la Universidad de los Andes en Bogotá.
Simon H. Johnson (Reino Unido, 1963)1 es un economista británico-estadounidense. Es catedrático Ronald A. Kurtz de iniciativa empresarial en la Escuela de Administración y Dirección de Empresas Sloan del MIT2 y miembro del Instituto Peterson de Economía Internacional.