Pormenores de los seguros de viaje online
Si es tu caso, en primer lugar, enhorabuena, eres de las personas que más envidia genera del planeta (al resto de mortales se les ha olvidado ya lo que significa descansar en verano). En segundo lugar, si eres de los pocos afortunados que todavía tienen vacaciones, o simplemente te gusta planear las cosas, es muy probable que contrates por Internet el viaje que estás planeando “porque en estas fechas hay chollos y es más barato”.
Para estas situaciones (y para ir preparándonos para las Navidades, los puentes que vienen en octubre y en noviembre o, directamente, para el año que viene) vamos a puntualizar algunos conceptos sobre los seguros de viaje online.
No debemos confundir los seguros de viaje online con otras modalidades que nos asaltan en la pantalla del ordenador a la hora de contratar un viaje, especialmente un vuelo, por Internet. La pérdida de las maletas durante un vuelo contratado online es una responsabilidad de la aerolínea, que ya hemos explicado en otros posts de este blog. Lo mismo sucede con las demoras de la compañía que conllevan alojamiento especial o pérdida del segundo vuelo en una escala. Todo se puede asegurar, pero en este caso sería una redundancia y un gasto duplicado si sabemos aplicar nuestros derechos de consumidores a la hora de reclamar.
Y siguiendo con otros servicios que nos pueden “sugerir” como “seguro de” en las compañías de viajes online o las páginas de aerolíneas no olvidemos que: la posibilidad de cancelar el viaje con antelación porque nos haya surgido una contrariedad no prevista en los días inmediatos es un “plus” que nos ofrecen asiduamente a la hora de contratar un viaje en avión, pero no es un seguro a no ser que medie una compañía de seguros de por medio.
Los seguros de viaje, online o no, dichos con propiedad, son contratos que firmamos con aseguradoras, que se rigen por la Ley del Seguro y que pueden ser obligatorios u opcionales, los contratemos por Internet o de forma presencial, según el viaje que hayamos planeado realizar.
Básicamente, necesitaremos facilitar a la aseguradora:
- Detalles y fechas del viaje que hemos decidido emprender.
- Nuestro DNI.
- Y, cómo no, pagar después de haber aceptado las condiciones generales y la política de privacidad (o no) de la compañía de seguros.
Seguros de viaje obligatorios
Lo primero, diferenciar entre los variados tipos de seguros de viajes que existen, tanto en contratación directa, como en página web, ya que estamos buscando delante de nuestro ordenador nuestro próximo destino.
En primer lugar, la mayoría de los viajes que pueden contratarse, si bien depende del tipo de vacaciones y transporte que usemos, traen ya de inicio ciertas coberturas básicas de cara a garantizar unas prestaciones mínimas del viaje contratado. Por supuesto, hay que asumir que este tipo de coberturas no se dan porque nuestro proveedor quiera portarse especialmente bien o ser majo con nosotros, no.
Se trata del Seguro Obligatorio de Viajeros (SOV), el cual supone que las empresas que se ocupan de nuestro viaje deben hacerse cargo de la responsabilidad civil que se les pueda atribuir por los daños a viajeros durante el transcurso de este. Es decir, este seguro mínimo debe cubrir las lesiones corporales que sufran los viajeros a consecuencia directa de un accidente o anormalidad que afecte o proceda del vehículo.
Además, tenemos otro tipo de seguros de viajes que son obligatorios para el viajero y deben ser adquiridos por su cuenta dependiendo del destino o actividades a realizar (por ejemplo, actividades de riesgo o deportes extremos). Así, este tipo de seguros son obligatorios para poder viajar a determinados países, como puede ser a Rusia o Cuba, ya que se trata de un requisito esencial para poder llegar a formalizar el visado. En este caso podemos comparar entre distintas opciones en el mercado, pero antes de contratar deberemos asegurarnos (en las bases del seguro) que cubre los mínimos exigidos, para evitar contratar algo que no nos alcance para cumplir con esas coberturas obligadas.
Seguros de viaje opcionales
Como este “mínimo” puede no ser suficiente si queremos viajar con garantías, existen seguros de viaje opcionales que son aquellos que, si bien en determinados casos es recomendable contar con uno, como puede ser un seguro de asistencia de viaje en caso de viajar al extranjero, pueden ser contratados de forma adicional a nuestro viaje y no son obligatorios ni están incluidos en el SOV o en los mínimos obligatorios para viajes que ya hemos mencionado. Son precisamente esos seguros que cuando entramos en una página de transporte de una agencia de viajes por Internet, el operador nos lo repite “una y otra vez” antes de permitirnos realizar el pago.
Una vez elegido el seguro y estudiado su alcance, cobertura y garantías, es posible que los estemos contratando para viajar al extranjero, por lo que condiciones como el idioma que podremos utilizar al llamar por teléfono en el extranjero, la información sobre aduanas, embajadas, consulados y una lista detallada de hospitales y médicos en el destino resulta primordial para decidir con garantías.
La aseguradora en cuestión, aunque sea por Internet, debe darnos la información suficiente para la contratación, que en resumen llega a su identificación fiscal como aseguradora (denominación social, CIG, número de registro como aseguradora, dirección…) y a los medios de contacto. Ojo, en el momento de contratar, con las condiciones generales que aceptamos: deben poder leerse y guardar copia antes de aceptar, y dejar muy claro las obligaciones de pago, medios para realizarlo y el uso que se dará a nuestros datos personales.
Las coberturas más usuales de los seguros de viaje que nos encontramos si buscamos en Internet las ofertas de las compañías son:
- Asistencia médica en caso de accidente que no esté incluido en el seguro del coche de alquiler, por ejemplo.
- Responsabilidad civil, si rompemos o un mueble en el hotel o quemamos la moqueta por fumar sin tener permiso.
- Anticipos económicos para honorarios de abogado, fianza judicial…
- Repatriación
Es importante tener en cuenta que estos seguros se pueden contratar, ya con el viaje o el vuelo comprado. No hace falta contratarlos en el momento de ir a pagar el viaje en la página web la agencia de viajes o de la aerolínea por un acuerdo que tenga esta con una aseguradora concreta. Únicamente en el seguro de los coches de alquiler, es la compañía la que decide y los integra en el precio del coche que alquilamos o en el del vehículo VTC que decidimos usar en la ciudad que visitamos.
14 días para el desistimiento del contrato de seguro de viaje.
Una vez hayamos contratado nuestro seguro de viaje online, o en la oficina de la aseguradora, es posible que queramos desistir del mismo por cualquier razón. Así, como casi toda contratación de este tipo, la normativa de consumidores y usuarios otorga un periodo de desistimiento de 14 días sin penalización desde que se contrata el seguro, teniendo en cuenta por supuesto, que no se podrá desistir del seguro en caso de que ya haya transcurrido nuestro viaje o hayamos ya dado un parte.
Además, no puede desistirse de determinados seguros (como el SOV ya comentado) ni de aquellos en los que nos hayamos servido ya de parte de las coberturas seguro. En este último caso tendrá que abonarse lo ya disfrutado o incluso más, dependiendo de las condiciones que hayamos aceptado, por lo que, repetimos, es muy importante leerse toda la letra pequeña del contrato de seguro.
Aunque nuestra seguridad en un viaje depende de muchos factores, y no podremos controlar todos, la seguridad a la hora de contratar un seguro online únicamente depende de nosotros: Dedicar un tiempo a leer bien y entender las condiciones y límites de lo que vamos a contratar es siempre la mejor opción.