La tarjeta de crédito, un aliado para tus vacaciones
Una buena práctica es utilizar la tarjeta de crédito y no dinero en metálico, de este modo evitarás las preocupaciones de un posible robo o pérdida. Pero, ojo, la tarjeta debe de ser un apoyo y no convertirse nuca en el problema durante las vacaciones.
En el extranjero
Si viajas al extranjero es recomendable que avises a tu compañía de que vas a utilizar la tarjeta en otro país. Así, evitarás llamadas o bloqueos del operador y podrán informarte de las comisiones por operar con tarjetas fuera de tu país de residencia.
En este caso, es fundamental que conozcas el tipo de cambio entre tu moneda habitual y la del destino elegido. Evita los aeropuertos, terminales de autobuses u hoteles para el cambio de moneda ya que las comisiones suelen ser mucho más altas. Si utilizas la tarjeta las comisiones serán menores que las que se aplican por cambio de moneda en metálico.
Precauciones
Toda precaución es poca con la tarjeta de crédito. Evita tenerla en la mano o sobre la mesa mientras esperas el cobro, cualquier descuido que cometas puede ser una oportunidad para otros.
Nunca apuntes el código PIN de tu tarjeta de crédito, aunque pueda parecer obvio, todavía existe gente que lo hace. Lo que si debes anotar son los números de emergencia de la tarjeta para poder solicitar el bloqueo rápidamente en caso de robo o pérdida.
Cajeros automáticos
Revisa siempre los cajeros en los que operes y asegúrate de recoger la tarjeta y el dinero antes de abandonarlo. Procura utilizar cajeros del mismo operador de la tarjeta para evitar las dolorosas comisiones.
Te recomendamos llevar varias tarjetas en el viaje, sin duda es la mejor forma de evitar problemas por si la habitual falla. Te sacará de cualquier apuro para realizar pagos importantes.
Seguros y créditos
Cada vez es más habitual que las tarjetas ofrezcan seguros. Infórmate de las coberturas que te ofrece tu tarjeta de crédito y analiza si otras compañías pueden interesarte más. Algunos de los seguros más habituales incluidos son: seguro de asistencia en carretera, pérdida de equipaje, robo, fraude, retraso en los vuelos, accidentes… e incluso seguro de vida.
Antes de salir de viaje es recomendable realizar un cálculo aproximado de la cantidad que deseamos gastar. Vuelo, estancia, regalos, entradas a museos o parques de atracciones, transporte… ¡los gastos se disparan!. Una alternativa es utilizar un crédito para aplazar las compras.
Una vez hechos los deberes, ya puedes realizar lo más importante, ¡disfrutar de tus vacaciones!
Otros artículos de interés: