La generación muda: nuestros jóvenes no cogen el teléfono
Las tecnologías avanzan a gran velocidad y las nuevas generaciones evolucionan con ellas y las utilizan a su conveniencia, hasta el punto de que algunos avances técnicos pueden llegar a condicionar la actitud de la juventud, e incluso a definir su comportamiento Tanto es así, que a los denominados millennials y generación Z, es decir, los jóvenes que hoy tienen entre 6 y 40 años, ya se les conoce como la generación muda, pues prefieren los mensajes que descolgar el teléfono para hablar.
De hecho, según un estudio de la Universitat Oberta de Catalunya (UOC), el 81% de los jóvenes siente ansiedad antes de reunir el valor suficiente para hacer una llamada. Prefieren el uso de aplicaciones para comunicarse por escrito o vía audios grabados, porque les resulta más cómodo y menos intrusivo.
Para un 75% de los jóvenes entrevistados en la elaboración del estudio, una llamada es una intrusión que no sabe cuánto tiempo lo mantendrá ocupado y, además, tienen la percepción de que quien llama tiene más necesidad que quien recibe la llamada, y por ello no ven motivo para descolgar si no lo desean.
Excusas
Y para salir impunes de su decisión, los jóvenes tienen todo un abanico de excusas que les brindan las mismas tecnologías: “lo tenía en silenció”, o “en vibración”, o “no tenía cobertura”. Y de este modo, evitan la conversación y la devuelven en forma de mensaje y sin estrés.
Una actitud que, según los investigadores, no es más que un mecanismo de defensa entre los más jóvenes frente a la falta de seguridad en sus habilidades comunicativas ante una presunta conversación presencial. Es decir, se sienten más seguros pudiendo meditar su respuesta, controlando los tempos de la conversación y pudiendo repasar sus mensajes antes de enviarlos. O directamente no hacerlo.
Esta actitud defensiva, evidencia de sus inseguridades, se agravó durante la pandemia, cuando se incrementaron hasta un 30% las vídeo llamadas. Un método de comunicación que aún les expone más, pues deben mostrarse en vivo y sin filtros ante sus intercomunicadores.