Día Mundial de los Derechos del Consumidor (15 de marzo): celebración de la igualdad

Aunque parezca una celebración de tintes comerciales, que aboga por los derechos de las personas frente al mercado, lo cierto es que el origen del Día Mundial de los Derechos del Consumidor se halla en la lucha de la igualdad de clases. Fue el presidente John F. Kennedy quien, un 15 de marzo de 1962, estableció que “rodas las personas sin distinción de clases ni de razas tienen derecho a disfrutar de los mismos beneficios como consumidor”.

Una celebración convocada desde 1983

Basándose en esa premisa social histórica, Naciones Unidas instituyó este día en 1983, y dos años después estableció un decreto para la protección de los consumidores. Un documento con el que se lograba  reivindicar, reconocer y legitimar los derechos de todas las personas a nivel internacional.

La idea de celebrar el Día Mundial de los Derechos del Consumidor es que las personas asuman un rol protagonista para defender sus derechos y poder exigir productos de calidad, que no dañen su salud, ni tampoco el medioambiente.

Consumo sostenible

En los últimos años, además de los derechos del consumidor en las transacciones comerciales y de servicios, también se busca fomentar la idea del consumo responsable para un planeta sostenible. Algo así como los derechos del planeta a un consumo humano que no le perjudique. Y es que para tener un planeta cien por cien sostenible, es necesario un consumo responsable, que no vaya en detrimento del medioambiente y donde se pueda seguir teniendo una mejor calidad de vida. Algo que lamentablemente dista mucho hoy de ser una realidad.

De hecho, según la ONU, tan sólo un 20% de la población consume un 80% de los recursos que hay en todo el planeta. Urge, por lo tanto,  un cambio de conciencia por parte de la sociedad, sí queremos seguir disfrutando a largo plazo un desarrollo, económico, social y ambiental sostenible.

Celebración del día 15 de marzo

Para celebrar el 15 de marzo el Día Mundial de los Derechos del Consumidor, basta con asumir el rol de consumidores reivindicativos, y exigir activamente el cumplimiento de nuestros derechos en toda transacción comercial. Esa es la manera de participar consciente y responsablemente de un derecho que nos beneficia a todos, pero que también nos obliga a tener un rol protagonista para que los mismos se hagan cumplir. Es fndamental tener una actitud crítica hacia los bienes y servicios que recibimos cada día.

 

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