¿Qué es un personal shopper o asistente de compras?
Esta profesión, cuya traducción literal seria “comprador personal”, nació en la gran manzana en la década de los 80. En Nueva York muchas personas no tenían tiempo para hacer sus compras. Sus agendas laborales eran tan apretadas que les era imposible realizar las tareas más básicas del día a día, y así nació el comprador personal que lo hacía por ellos. De modo que, en un principio, lo que realmente compraba el cliente al contratar a un personal shopper era tiempo. Pero a partir de ahí, esa nueva profesión empezó a desarrollarse, e incluso a especializarse, y hoy en día son auténticos consejeros en los terrenos más diversos, incluido el estilismo personal. Auténticos asesores de imagen, entre otras muchas cosas. De hecho, hoy en día es el sector de la moda y los complementos donde más trabajan estos profesionales.
No obstante, hay otros muchos campos de acción para estos asesores, como por ejemplo los especializados en materia tecnológica. En este caso, los personal shoppers analizan todas aquellas necesidades que puedan tener sus clientes, ya sean en el ámbito laboral o personal, relacionadas con las nuevas tecnologías, y de este modo les asesora en relación a las compras de hardware o software que más necesitan, o los complementos que mejor cubrirán sus exigencias, ya sean móviles, agendas, portátiles o útiles electrónicos destinados al ocio.
Existen incluso los profesionales de la asesoría de compras por Internet. Los personal shopper online. Éstos se dedican a buscar en la red aquello que requiere el cliente, y que puede encontrarse en mercados de todo el mundo más allá de los espacios comerciales físicos o las fronteras nacionales. Estos compradores pueden ser independientes o pertenecer a alguna empresa de servicios de compra online. En estos casos pierden un poco la esencia del trato directo asesor/cliente, tan característico de la labor del personal shopper.
Y es que en términos generales, a excepción hecha de la opción online antes explicada, la relación del personal shopper con el cliente debe ser cercana, pues el asesor debe conocer bien las aspiraciones y el estilo de vida de quien contrata sus servicios. Clientes que habitualmente suelen ser de un alto poder adquisitivo. Por ello, el oficio de asesor de compras suele exigir una serie de características al profesional, que incluye una educación refinada, empatía, buenas maneras sociales, buena presencia, un nivel cultural considerable, conocimientos de marketing, discreción, tacto y una cierta diplomacia, y estar siempre al día de nuevas tendencias, modas y tecnologías. Es decir, se trata de una profesión bastante exigente y en continua formación. Cada vez es más habitual que los grandes comercios cuenten en plantilla con estos profesionales a disposición de su clientela.