¿Qué es una cuenta en participación?
Las Cuentas en participación es una figura mercantil que permite invertir en negocios si tener que crear una sociedad y limitando la responsabilidad a la aportación realizada, de modo que tanto las posibles pérdidas o ganancias serán también proporcionales.
La fórmula puede resultar ideal para emprendedores y business angels, ya que es una manera sencilla y práctica de interesarse e implicarse en las operaciones de otros empresarios sin necesidad de crear ninguna estructura societaria aparte ni ningún patrimonio separado destinado a dicha coalición empresarial.
En una cuenta en participación hay dos figuras activas, el partícipe, que se limita a poner un capital en el negocio, y el gestor, que pude o no aportar dinero al proyecto, pero que es el que lo lleva adelante bajo su nombre. En el caso de que se obtengan beneficios se recuperara el capital y los rendimientos que se hayan pactado contractualmente.
El dinero del partícipe se integra en el patrimonio del gestor, que lo usa para el negocio convenido. Es un préstamo a todos los efectos, incluidos los contables y fiscales, pero con el matiz de que el prestamista asume el riesgo del negocio – ni la propiedad ni la gestión del mismo- con el límite del capital aportado, a cambio de una remuneración derivada de los beneficios del proyecto si los hubiera.
Regulación
La regulación legal de las cuentas en participación se encuentra en los artículos 239 a 243 del Código de Comercio.
Las partes gozan de la más amplia libertad para establecer las condiciones de la relación, siempre dentro de la legalidad vigente.
El acuerdo podrá extinguirse en función de la aplicación de las reglas sobre disolución de sociedades. Estás son, por ejemplo, mutuo disenso, transcurso del tiempo señalado en el contrato, muerte o incapacidad del socio gestor, de no existir pacto de continuar la cuenta con sus herederos, o la quiebra del socio gestor en razón a su inhabilitación para el ejercicio del comercio subsiguiente a la misma, entre otras.
