Cepillo de dientes, ¿manual o eléctrico?

Eficacia:

– Cuando aparecieron los primeros cepillos eléctricos, con una tecnología incipiente, todavía había dudas entre estos y los manuales. Hoy en día, la tecnología oscilo-rotativa (movimiento rotativo de una pequeña cabeza redonda que se adapta y limpia el diente) es mucho más eficaz, sobre todo porque alcanza lugares que el cepillo manual no puede. Esta técnica de limpieza consiste en limpiar el diente de arriba a abajo en un movimiento circular tanto por su cara exterior como interior.  Además, por las características técnicas del cepillo eléctrico, en particular su forma y tamaño, podemos acceder a zonas difíciles de la boca.

Recomendación de los expertos:

– Lo principal es la técnica de cepillado y no el objeto. Más vale un cepillado manual preciso que un mal cepillado eléctrico. Los dentistas recomiendan hacerlo durante tres minutos en 4 puntos, a partir de 9 años.  Primero cepillar separadamente la parte superior de la inferior, luego efectuar movimientos rotativos para cepillar los dientes y las encías, inclinando el cepillo a 45º del diente. Por último, seguir un trayecto preciso para no olvidar ningún rincón de la boca y ningún diente.

Aquellos que prefieren los cepillos de toda la vida deben ser cuidadosos, está demostrado que tendemos a ejercer una presión excesiva sobre los dientes y sus encías con estos, y a frotar  más fuerte durante más tiempo del necesario, ¡lo que puede dañar el esmalte!

Características:

– El eléctrico es más pesado que el manual. La mayor parte de los modelos pesan entre 170 y 397g. a causa del peso de las pilas. Su ventaja, es que hacen prácticamente todo el trabajo. Es principalmente aconsejable para personas mayores, personas discapacitadas y niños. Teniendo en cuenta que al 83% de nuestros pequeños no les gusta cepillarse los dientes, el cepillo eléctrico puede ser una solución sencilla y divertida para los querubines de más de tres años. En resumen, con un cepillo eléctrico, dos minutos de cepillado es suficiente.

– No hay nada más simple que un cepillo de dientes manual. Su forma y su longitud es perfecta y la mayoría de la gente no tiene problemas para utilizarlo. Más ligero, es mucho más manejable que el eléctrico. En el despacho, en vacaciones y el fin de semana, es la solución perfecta y evidentemente, con un cepillo manual no hay problemas de carga de pilas, sólo necesita un poco de esfuerzo.

El cepillo manual puede transportarse en un bolso, aunque los fabricantes de cepillos eléctricos cada vez encuentran formas de hacerlos más ligeros y pequeños. Pero el eléctrico convence más a los niños para mantener una rutina diaria de cepillado de dientes.

Presupuesto:

– Un cepillo de dientes eléctrico recargable cuesta entre 20 y 180 euros. Los recambios del cepillo se acercan a los 10€ y suele ser necesario hacer el cambio de cabezal cada 3 meses. El precio medio anual de un cepillo de dientes eléctrico es de 100 euros. Si se opta por un modelo a pilas el coste se reduce considerablemente: de 6 a 10 euros. Pero su eficacia no está asegurada si no se cambian regularmente sus pilas.

– El precio de un cepillo de dientes manual es de entre 3 y 5 euros si se selecciona un modelo eficaz (cepillo suave y cabeza pequeña) y de calidad. Vale más evitar los cepillos baratos porque el cepillo se desgastará más rápidamente. Los profesionales aconsejan cambiarlo cada 3 meses. Si hacemos caso a las recomendaciones, lo normal es que no gastemos más de 16 euros anuales.

Conclusión :

La inversión merece la pena, el cepillo de dientes eléctrico ya ha tomado el relevo del cepillo manual. Además es ideal para inculcar la educación higiénico-bucal a los más pequeños, pero sobre todo porque facilita y realiza mejor el trabajo de la limpieza de nuestros dientes ayudando a mantenerlos limpios y blancos.