Bluesnarfing o ciberataque a través de bluetooth
Los ciberdelincuentes no descansan y no dejan de innovar en sus estrategias delictivas. Así que debemos estar muy atentos y ser precavidos para no ser víctimas de los estafadores digitales. Y una de las amenazas más recientes es la denominada “bluesnarfing”, que consiste en el robo de los datos del teléfono a través del Bluetooth.
Bluetooth conectado
Las autoridades advierten de una nueva modalidad de estafa que está proliferando en los últimos meses. Se trata de una amenaza conocida con el anglicismo “bluesnarfing”. El término se refiere a un tipo de ciberataque en el que el delincuente, ubicado a una distancia de entre 10 y 15 metros, puede acceder a la información de un teléfono móvil sin el conocimiento del propietario. Una invasión que solo es posible cuando el Bluetooth del teléfono móvil está encendido.
Por ello la policía y los expertos en ciberseguridad recomiendan no tener el Bluetooth conectado por defecto, ya que ello facilita el trabajo de los ciberdelincuentes. Les permite infiltrarse en los dispositivos y robar datos personales, mensajes, contactos y más. Lo prudente es apagar el Bluetooth al salir de casa. Es difícil que nadie pueda conectarse a través de éste cuando estamos en el interior de nuestra vivienda.
Mantener activado el Bluetooth de tu teléfono puede poner en riesgo tu privacidad. Consiste en una tecnología que nos permite conectar diferentes dispositivos de forma inalámbrica, y eso nos ofrece un amplio abanico de posibilidades y ventajas. Pero no debemos olvidar que esas mismas vías pueden ser utilizadas por los delincuentes para llevar a cabo sus ciberataques. Y ese tipo de fraudes son los que se denominan “bluesnarfing”.
Los peligros del “bluesnarfing”
Tener activado el Bluetooth en nuestro equipo puede suponer algunos problemas. Y es que, aunque no lo estemos utilizando, el servicio sigue funcionando. Es decir, sigue enviando datos. Algo que ocurre incluso sin estar vinculado a otro aparato. La interfaz se encarga de enviar, de forma periódica, el UUID a otros dispositivos. Se trata del identificador único universal, algo que sirve para que otros aparatos puedan conectarse.
De este modo, y sin que seamos conscientes de que estamos en riesgo, si tenemos activada esta conexión en el Smartphone nos exponemos a ser atacados por los hacer y ver violada nuestra intimidad.
Otra modalidad de ataque a través del Bluetooth es el conocido como Man-in-the-Middle. Consiste en un atacante que se interpone en la conexión entre dos dispositivos. Éste, al posicionarse, puede leer qué se está enviando e incluso modificar esos datos.
Uno de los peligros de los ataques “bluesnarfing” es que pueden propagarse de un dispositivo a otro. De este modo, no solo robarán información o tomarán el control del primer dispositivo afectado, sino que se extenderá a todos los dispositivos con los que interactúe con posterioridad al ataque.
Evitar el “bluesnarfing”
La forma más sencilla de evitar el “bluesnarfing” es que desactives el Bluetooth cuando no lo uses o que ni siquiera utilices esta conectividad. Pero en cualquier caso, siempre que la dejes de usar, desconéctala de tu Smartphone o de cualquier otro dispositivo.
Hay que tener muy en cuenta la forma en la que funciona la tecnología bluetooth. Si está conectada, nuestros dispositivos siguen a la escucha, sensibles a cualquier conexión potencial, y facilitará el acceso a cualquier atacante.
La policía insiste en que también es importante configurar nuestro dispositivo en modo «no detectable». Esto dificultará que los intrusos encuentren tus dispositivos, aumentando tu seguridad. Y siempre hay que rechazar las solicitudes de Bluetooth que recibamos de dispositivos desconocidos.
Otra recomendación de seguridad es utilizar contraseñas seguras para proteger tu dispositivo. Y por último, mantener el software actualizado. Es la manera de asegurarse de que nuestro dispositivo cuenta con los últimos parches de seguridad y está protegido de vulnerabilidades conocidas.