Prepara tu piel para el verano
Con el verano a la vuelta de la esquina es imprescindible preparar la piel para poder enfrentarnos a largas jornadas de playa y piscina. Nos expondremos muchas horas a los rayos solares, al agua de mar y al cloro, pero ¿tienes lista tu piel?
Todas soñamos con lucir una piel sana y cuidada pero, para cumplir este deseo, es necesario hacer un esfuerzo y adelantarnos al verano. La tan demandada “operación bikini” en estas fechas debe ir más allá de perder esos kilos demás y tenemos que prestar atención a nuestra piel durante todo el año.
Es importante puesto que no sólo se trata de un tema estético, sino también de salud. Siguiendo unos sencillos consejos podemos evitar los daños que causan los rayos ultravioleta, como el envejecimiento de la piel, manchas solares e incluso carcinomas.
Purificar: La rutina de belleza debe empezar por una buena limpieza que prepare la piel para asimilar correctamente el tratamiento. Una vez liberada de las impurezas, estará más receptiva. Es sencillo, sólo debes aplicar un limpiador dos veces al día, para retirar la suciedad que castiga tu rostro y cuerpo.
Exfoliar: Es el paso imprescindible para que las cremas hagan todo su efecto. Es recomendable hacer una exfoliación y limpieza de cutis una vez a la semana, excepto si se trata de una piel sensible, en cuyo caso será cada quince días. De este modo, conseguirás eliminar las células muertas de tu piel, y devolverás un aspecto suave y liso. La exfoliación ayuda a que los tratamientos hidratantes y anticelulíticos penetren con más facilidad y sean más eficaces.
Hidratar: Los rayos solares penetrarán en nuestra piel y la secarán, por lo que es muy importante hidratarla a diario, tanto del cuerpo como de la cara, mediante la aplicación de cremas específicas para cada tipo de piel, que proporcionarán elasticidad y frescura. Estas cremas ayudan a activar la melanina, nuestra pantalla protectora natural, facilitando un bronceado sin quemaduras, bonito y uniforme.
Siguiendo estos consejos, conseguiremos llegar al verano con nuestra piel bien preparada y podremos disfrutar del sol, aunque, eso sí, deberemos hacerlo gradualmente y utilizando siempre un filtro de protección solar. Los especialistas aconsejan que las primeras exposiciones se realicen durante el mes de mayo, ya que en esta época los rayos solares aún no son muy agresivos y afectan menos a la piel.
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