Una web que te ayuda a tomar las
mejores decisiones financieras

El gobierno impone la moderación por decreto para fomentar el ahorro energético

La crisis energética provocada por los altos precios y por la amenaza de Rusia de cortar el suministro de gas a Europa ha provocado la reacción legislativa del Gobierno de España, que ha aprobado un decreto ley con un paquete de medidas para mejorar la eficiencia y que garanticen el ahorro de energía. Veamos cuáles son esas medidas, que serán de obligado cumplimiento para empresas, comercios, hoteles o transportes, así como en el sector público, mientras que únicamente se considerarán recomendaciones para el ciudadano.

Entre las principales y más controvertidas medidas está la del apagado de luces exteriores y escaparates en todos los comercios y edificios públicos a partir de las 22 horas. En caso de incumplirse se aplicaría un régimen sancionador.  Esta norma no afectará llegado el momento al alumbrado navideño, ni tampoco a los alumbrados ornamentales de monumentos, siempre que no sean edificios desocupados por la noche.

Los límites a la temperatura, tant en verano como en invierno, es otro de los puntos importantes del decreto. Así,  con aplicación inmediata y vigencia hasta noviembre de 2023, los aires acondicionados de edificios administrativos, espacios comerciales o culturales, los espacios comunes de los hoteles, cines o estaciones de transporte no deben estar por debajo de los 27 grados, mientras que en invierno los sistemas de calefacción no podrán superar los 19 grados. Y para poder controlar el cumplimiento de esta exigencia térmica, la normativa exigirá la instalación de termómetros en todas los establecimientos afectados. Además, éstos deberán contar con un sistema para mantener las puertas cerradas y evitar así el derroche energético cuando estén funcionando los sistemas de calefacción o refrigeración. Estas medidas también permitirán a los consumidores (comerciantes) rebajar sus recibos de la luz.

Flexibilidad

Todas las medidas se aplicarán teniendo en cuenta «flexibilidades relevantes», con el objetivo de garantizar los derechos de los trabajadores, la seguridad laboral y las condiciones térmicas en casos que queden debidamente justificados. Así, los límites de temperatura no se aplicarán, por ejemplo, en hospitales, centros educativos, peluquerías, gimnasios o lavanderías. Ni tampoco en aquellos lugares de trabajo donde sea necesario mantener unas «condiciones climáticas adecuadas» para los trabajadores, como serían las cocinas de los restaurantes. También se contemplarán excepciones cuando haya picos de ocupación en según que comercios o instalaciones.

El teletrabajo vuelve a ser uno de los comodines del ahorro energético, pues es una de las modalidades que más ayuda a reducir el impacto energético producido por los desplazamientos al lugar de trabajo y el consumo de energía en el propio centro. En el caso del sector público, los empleados tienen tres días semanales de trabajo a distancia y dos presenciales.

Se pretende potenciar también el uso del transporte público o colectivo, así como otras medidas de movilidad sostenible; favorecer el autoconsumo y el uso de las energías renovables, y se contemplan nuevas ayudas para las empresas del sector terciario. 

Volver al principio
Ir al contenido