Más ejercicio y menos fast food y pantallas contra la obesidad infantil

La Fundación de los hermanos Gasol ha presentado un estudio pionero llamado Pasos, que evalúa  el nivel de actividad física y sedentarismo de los niños y adolescentes en España. Y los resultados no pueden ser más preocupantes, ya que un tercio de los menores presenta sobrepeso u obesidad. Las principales razones de una realidad tan poco saludable son la falta de ejercicio y los excesos con el fast food y el uso de las pantallas (móviles, televisión y videoconsolas).

En los últimos años la prevalencia de obesidad abdominal ha aumentado en un 7’9% en nuestro país, y el estudio alerta de la necesidad de introducir un cambio drástico en nuestros hábitos de conducta.

Casi el 80% de los niños/as y adolescentes excede el tiempo de uso de pantalla recomendado por la Oraganización Mundial de la Salud (OMS), cifrado en menos de 2 horas/día en fin de semana. Este abuso es más pronunciado en el género masculino durante la infancia y adolescencia.

Otra de las recomendaciones de la OMS que se desoye es la del tiempo que los niños de entre 8 y 16 años deberían dedicarle diariamente a las actividades físicas. Así, el 63’6% de los niños/as y adolescentes no alcanza los 60 minutos de Actividad Física Moderada o Vigorosa (AFMV) al día. Este incumplimiento es más pronunciado en el género femenino -el 70,4% de las niñas no llega al nivel recomendado frente al 56% de los niños-, y entre los adolescentes -el 72,4% de los alumnos de secundaria no cumple la recomendación, frente al 55% de los de primaria.

Hábitos alimenticios

Hábitos alimenticios más saludables, a base de dieta mediterránea en contraposición a las tendencias gastro-recreativas del fast food, serían muy importantes para contrarrestar los efectos de la falta de ejercicio. A parte de otros beneficios evidentes para la salud por la via de una nutrición más equilibrada.

Desde la fundación, los hermanos Gasol han lanzado cinco peticiones que afectan tanto a las instituciones públicas como al sector privado y a la sociedad civil en general. Todos deben concienciarse. Para ello piden que se lleven a término las siguientes medidas: Invertir en políticas de prevención de la obesidad infantil, poner en marcha intervenciones comunitarias que promuevan la salud, incrementar las horas y la calidad de la educación física en los centros educativos, reforzar la formación de los equipos de pediatría e impulsar el Plan Nacional contra la Obesidad Infantil.