Nuevo bono social térmico contra la pobreza energética
La crisis quedó atrás, pero siguen siendo muchos los que tienen problemas para llegar a final de mes. Por eso, a raíz de las comentadas subidas de precio de la electricidad y a las puertas de un invierno que se presume duro, el Gobierno de España ha decidido ampliar el acceso de los ciudadanos al bono social eléctrico y crear una nueva ayuda para la calefacción, que ya se conoce popularmente como el bono térmico.
Son medidas aprobadas por decreto en el Consejo de Ministros, y que entrarán en vigor de manera casi inmediata.
Entre las principales novedades del bono social eléctrico, está la inclusión de la suspensión durante seis meses del impuesto a la generación eléctrica, que se carga en la factura de la luz, y que pasará de un 7% a prácticamente cero. Además, la medida amplía un 15% los límites de consumo a los que se puede aplicar los descuentos del 25% ó el 40% del bono social.
Las ayudas incluyen a las familias monoparentales entre las que tienen circunstancias especiales, aunque tengan una mayor renta que la establecida en los diferentes tramos generales. Una ventaja que, hasta el momento, solo afectaba a víctimas de violencia doméstica, del terrorismo y personas con discapacidad.
Bono para la calefacción
Las medidas incluyen la novedad del bono social térmico, una ayuda para la calefacción que se abonará a los beneficiarios del bono social eléctrico, en función de su grado de vulnerabilidad y las temperaturas de la zona en que vive para pagar gastos de calefacción, agua caliente y cocina.
Y por último una medida muy importante de cara al espectro social que se beneficiará de la protección del Estado, pues el decreto añade que no se podrá cortar el suministro eléctrico por impago a hogares que tengan el bono social y en los que vivan menores de 16 años, personas con discapacidad igual o superior al 33% y dependientes reconocidos de grado 2 ó 3.