¿Qué es una declaración paralela y qué hacer si la recibimos?
El mes pasado finalizaron los plazos para presentar la declaración de la renta 2017, pero tal vez no haya acabado aquí nuestro compromiso con Hacienda. Si hemos cometido algún error en nuestra renta, voluntario, por error u omisión, podríamos recibir lo que se lama una declaración paralela. Veamos qué es y qué debemos hacer si la recibimos.
Una paralela es en realidad una propuesta de liquidación provisional que la Agencia Tributaria emite al contribuyente para enmendar o corregir un error. Algo así como la declaración alternativa que Hacienda considera correcta, y que le envía al afectado tras detectar que un posible error en los datos aportados.
En una declaración paralela vendrán marcados los errores que Hacienda considera que se han cometido, así como las correcciones. Lo hacen en dos columnas paralelas – de ahí su nombre-, enfrontando así los datos aportados por el contribuyente con los que la Agencia Tributaria considera los correctos.
Recursos
Las declaraciones paralelas pueden recurrirse a la Agencia Tributaria, que antes de enviarla suele hacerle llegar al contribuyente un requerimiento para que aporte justificantes de ingresos y gastos o deducciones. Si no puede justificar lo requerido, entonces Hacienda le enviará la paralela en sí. Es aquí cuando puede recurrirse la liquidación provisional, y después aún podrá recurrirse la definitiva. Pero cabe tenerse en cuenta que al recurrir la primera se pierde un 30% de la reducción de la posible sanción, y si se recurre la definitiva, un 25% más.
Para recurrir existe un modelo específico que tanto puede obtenerse en la web oficial de la Agencia Tributaria como en algunas entidades como la OCU, que la pone a disposición del contribuyente.
Las declaraciones paralelas suelen llegar al contribuyente durante los seis primeros meses después de haber presentado la declaración, pero en realidad Hacienda cuenta con un periodo de 4 años para hacer una revisión.
Los errores más habituales que suele detectar Hacienda y que pueden motivar una paralela son los aritméticos, que son simples errores de cálculo cuando se hacen a mano; los detectados a través del cruce de datos (si no se declara un piso alquilado y el inquilino sí, Hacienda se enterará al cruzar ambas rentas); o los que implican una disparidad de criterios, pues algunas normas o leyes están sujetas a interpretación. Las exenciones o deducciones son las que más frecuentemente provocan dichos errores.
