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La ley no permite en España las hipotecas que pagan al cliente

Hace unas semanas una noticia revolucionaba el mercado financiero. Un banco danés anunció un nuevo producto: la primera hipoteca que paga intereses a los clientes. ¿Es eso posible? Sí, pero en España no. La nueva Ley Hipotecaria no lo permite. Veamos porqué.

La nueva ley marca un suelo natural al 0% del Euribor.

El Euribor ha alcanzado mínimos históricos en los últimos tiempos. El índice que marca el crecimiento o bajada de los intereses de las hipotecas nunca había estado tan bajo y por lo tanto los créditos hipotecarios se han abaratado considerablemente. Hace algunos días alcanzaba un -0’3% inédito hasta la fecha.

Ha sido en este escenario financiero cuando la banca danesa, y más concretamente el tercer banco del país, el Jyske Bank, ha lanzado una oferta hipotecaria rompedora con préstamos para compra de vivienda a 10 años con un interés del -0,5%. Un porcentaje que, al estar por debajo del Euribor, significa algo impensable hasta el día de hoy: una hipoteca que le paga intereses al cliente y no al revés.

En España no

La hipoteca perfecta para cualquier ciudadano… danés, porque en nuestro país no es posible desde la entrada en vigor el pasado mes de junio de la Nueva Ley Hipotecaria. En ella se establece que “en las operaciones con tipo de interés variable no se podrá fijar un límite a la baja del tipo de interés»; pero en cambio añade que «el interés remuneratorio en dichas operaciones no podrá ser negativo». Es decir que, más allá de la polémica de las cláusulas suelo de las antiguas hipotecas, las de nueva contratación cuentan con un suelo natural marcado por ley para la caída de los tipos de interés, que está fijado en el 0%.

También hay que decir, más allá de lo sorprendente de la oferta, es que un producto a tan corto plazo de tiempo como los créditos propuestos por el banco danés (10 años), parece destinado más bien a quienes quieren remodelar su casa, y no a los que quieren comprarse una nueva: A no ser que se disponga del suficiente dinero como para pagar letras muy elevadas cada mes, o que puedan pedir al banco un porcentaje muy bajo del coste total de compra del inmueble.

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