Europa plantea exigir las beterías extraíbles de móviles para alargar su vida útil
El gesto que observamos en la foto ya no se ve. Era de lo más común, pero desapareció cuando los fabricantes de móviles decidieron integrar las baterías en el mecanismo interno de los terminales, y acabaron así con las extraíbles. Algo que el Parlamento Europeo quiere recuperar, para alargar así la vida útil de los smartphones, con el ahorro que ello significa para los consumidores, y reducir los deshechos tecnológicos, cuyo impacto en el medioambiente es relevante.
Los fabricantes no están de acuerdo, pero Europa lo tiene claro y pretende legislar en este sentido. Hay que recuperar las baterías extraíbles que permitían a los usuarios renovarlas cuando su rendimiento disminuía. El hecho de que en los modelos actuales estén integradas, una avería en esta pieza obliga a cambiar el móvil entero, lo que supone más gasto para el ciudadano, pero un negocio redondo para la industria. Primera desventaja que Europa pretende paliar. Pero es que además, los continuos cambios de móvil, ya que las baterías/pilas son su punto débil, y hoy mortal de necesidad en casi todos los modelos, provocan una ingente cantidad de deshechos tecnológicos con piezas contaminantes que perjudican la salud ecológica del planeta.
Más vida útil
Con esta iniciativa que da otro paso en la lucha contra la obsolescencia programada, el Parlamento pretende ofrecer baterías de repuesto a los propietarios de los aparatos, para resucitarlos unos años más, y lograr una tasa de reciclaje del 90 % en 2026. La nueva normativa exigirá a los fabricantes que garanticen la disponibilidad de baterías de repuesto durante la vida útil legal del producto.
Por otro lado, y en el mismo orden de cosas, la institución europea quiere aumentar el uso de materias primas recicladas, como el cobalto, el litio, el níquel o el plomo, para fabricar las baterías.